No sé los otros grupos de juego que pueblan el infinito y basto mundo friki, pero en la Partida del Lunes, tenemos un pequeño ritual cuando un máster cede su “trono” a otro compañero.
Para comenzar, he de decir que no todo
el mundo está preparado para ser un “máster cabrón”. Uno tiene
que estar hecho de una pasta especial para convivir con dicho título.
O sea: que tienes que tener mú mala leche y ganas de joder a los
jugadores a más no poder!
Arrrrrggggghhhhh!!!... estoy dun cabreo!!
Pues en nuestro grupo, quién abandona
el cargo de director de juego tras una campaña, ofrece al siguiente
máster un pequeño dado (nada del otro mundo... un d6 de color
naranja... no os creáis!) y la suerte en el juego como “oh, gran
dominador de los sucesos y los encuentros del mundo rolero”.
Pero a parte de ese dado, un máster
debe tener su equipo a punto: las minis, las plantillas, los
rotuladores borrables, los dados, las nuevas fichas de Pj y... la
libreta de máster.
Siempre me ha gustado anotar todo lo
que sucede, o debe suceder, durante mis partidas. Allí queda anotada
la historia, los personajes, los encuentros, los enigmas, los mapas,
etc. Es como el baúl de los secretos de un máster. Quién tiene el
poder sobre la libreta, tiene el poder sobre el destino de los
jugadores.
Normalmente utilizo dos libretas: una
de pequeña y más manejable (para llevar encima en todo momento), y
otra más grande y, por denominarlo de alguna forma, la “oficial”.
Puede que en cualquier momento se te
ocurra una idea, un trasfondo, un encuentro interesante... lo que sea
para utilizar durante la partida actual o futuras partidas. En este
caso, utilizo la libreta pequeña donde, con 4 notas, queda plasmada
aquella idea que más tarde daré forma.
En la grande es donde aparece el
resultado final, o más organizado, de toda la estructura de la
aventura. Es el “gran secreto” de la campaña.
Tras un periodo de sequía creativa en
cuanto a ideas roleras, he vivido un cambio y llevo una temporada de
bombardeo de nuevas ideas. Mi masa gris del tamaño de un pistacho,
que algunos se empeñan en llamar cerebro, echa humo con visiones de
nuevas aventuras, enemigos indestructibles, situaciones
comprometidas, etc.
Todo, todo esta anotado y preparado
para ser moldeado para llegara formar parte de una campaña de La
Partida del Lunes.
Lo que sí está claro es que Alcalde,
el actual “máster cabrón” de nuestras aventuras, ha aprendido
la lección y también se hizo con una de estas libretas. Que gustazo
ver cuando le brillan los ojos al pasar sus páginas, cuando relee
sus notas y prepara los encuentros. Lástima que al final, todo
aquello que ha preparado no tiene el objetivo deseado. Siempre
acabamos vivos y con el enemigo criando malvas.
Nosotros, en nuestras partidas de aquelarre, tenemos un tomo, del cual me encargo yo. Es el llamado Aker Codicem (te suena? XP) en él anoto cada cronica de nuestras partidas según las vamos jugando, desde el punto de vista y conocimiento de mi personaje.
ResponderEliminarSobre apuntar ideas, como llevo siempe un portatil encima o el tablet, tengo un bloc de notas en el escritorio para apuntar las cosas que me vengan a la inspiración, y si no, a malas, siempre lleo encima en "err borzo" una pequeña libreta para apuntar cualquier cosilla que surja.
Apaños que se hace uno olle
Yo tengo un bloc de notas, de papel reciclado, con una de las caras todo llena de impresiones que nunca deberían haber visto la luz. Todo ese taco de papel está sujeto por una pinza.
ResponderEliminarY la verdad es que en ese bloc de notas tengo bastante información, tengo datos de tres partidas y varias cositas más. A mi me gusta poderla manosear, esbozar dibujos, tachar y redefinir. Y de este bloc de notas, paso a limpio en el pc lo que creo que merece la pena.
Normalmente termino con un dosier con cada partida que mastereo, con avatars de los pnjs, mapillas, mapa general, antecedentes, tramas, encuentros, etc.