Por un motivo u otro, llevamos ya casi
2 semanas sin jugar los lunes (mejor dicho, sin poder continuar
nuestra campaña actual) y un mes “trasteando” con interrupciones
y bajas en las sesiones de juego. Y la entrada de hoy va sobre este
tema: como puede afectar la regularidad de las quedadas en nuestra
aventura (joder, si parece que me he puesto serio y tó!).
Cuando voy curioseando los diferentes
blogs de rol que existen por la red, encuentro en muchos la tendencia
en los grupos de juego a encontrarse de forma quincenal. Sea por
motivos varios (disponibilidad, familia, trabajo...) les es imposible
que dar más a menudo, aunque muchos quisieran que fuera así. En La
Partida del Lunes, podemos sentirnos afortunados de poder
encontrarnos cada semana y realizar nuestra partida.
Pero a menudo pienso en como puede
afectar estas dos semanas, entre sesión y sesión, a la aventura.
Debe ser necesario un recordatorio para recordar y retomar la
aventura hasta en lugar donde se encontraban los Pj's. Pero puede
afectar a la motivación del jugador por aquella campaña?
Puede que muchos jugadores no acaben de
“meterse” en la historia planteada por el master ya que el lapso
de tiempo entre sesión y sesión puede afectar a la tensión,
implicación, interés de estos en la partida.
Nunca he jugado de forma tan
distanciada entre sesiones, pero creo que me costaría “vivir”
con intensidad la aventura con tantos días entre encuentros. A
veces, hasta me cuesta recordar donde nos habíamos quedado la sesión
anterior!!
En la partida de Jorge, la jugada
actualmente, este parón ha llegado en el peor momento: el tramo
final de una gran aventura. No quiero decir que haya decaído el
interés por la interesante y curiosa trama planteada por nuestro
“master-cabrón”, no... simplemente que, la tensión fomentada
durante las últimas sesiones de juego, ha quedado algo diluida por
estos inesperados parones.
Que Jorge será capaz de retomar
nuestro”gusanillo curioso” y meternos de nuevo en la trama?
Seguro, pero no es lo mismo tener el “frenazo” al inicio de la
aventuro que no en la parte final, a escasas dos sesiones de juego.
De momento, mi partida ya está
preparada para, cuando sea necesario, iniciarla con toda la carne en
el asador. Y esperemos no tener tan desafortunados contratiempos para
poder seguir el ritmo de sesiones al que estamos acostumbrados.
No hay comentarios:
Publicar un comentario