Limpió su espada en la capa del último
drow que quedaba en el grupo de asaltantes. Tras de sí, cuatro
cuerpos de elfos de las profundidades, yacían inertes en medio del
camino.
Habían aparecido de repente, siempre
con el ansia de saciar su sed de muerte. Pero habían escogido a la
peor víctima...
Nanuk, tras un pequeño encargo que
había realizado escasos días atrás, en el que tubo que acabar con
un grupo de trolls que hacían la vida imposible a las gentes
cercanas a Roble Negro, se dirigía a la capital para rendir cuenta a
ciertas historias sobre la existencia de dragones en las Montañas de
la Luna.
La verdad es que aquel bárbaro había
nacido para combatir y sobrevivir en las inhóspitas y peligrosas
tierras de Valkirihan. Se había enfrentado a todo tipo de criaturas,
saliendo siempre victorioso de todos y cada uno de aquellos
encuentros. Ogros, goblins, gnolls, azotamentes, contempladores,
golems... Nadie podía decir que había visto a Nanuk arrodillarse
frente a un enemigo.
Pero existía un secreto que el
guerrero procuraba guardar, su punto débil: los gatos!
Y era cierto. Pocas cosas podían
acabar con el guerrero, y una de ellas era enfrentarse a un gato. Era
ponerse frente a aquella criatura del demonio y comenzar a
estornudar, llorar como una magdalena, caerse el moquillo, notarse
mareado y con cierta sensación de mal cuerpo. Así de simple...
Un hechicero le había nombrado el
motivo de aquella debilidad contra un animal tan, aparentemente,
apacible. Según él, la maldición recibía el nombre de “alergia”.
Desde aquel día, Nanuk, evitaba en
todo momento el contacto con aquellos malditos gatos... Pero siempre
había algún que otro descuido.
Buenas gente,
Esta chorrada, tiene una explicación...
aunque no lo parezca.
Hace unas semanas, en nuestro obligado
encuentro para realizar la sesión de juego de la partida de Alcalde,
aparecieron por allí los “queridos” gatitos de Alícia y Jorge.
Digo “queridos” con todo el cariño del mundo...aunque les tenga
una manía infinita a esos animales egocéntricos e interesados, y
desee que todos y cada uno de ellos acaben en una arena de
gladiadores rodeados de una jauría de perros rabiosos deseosos de
comer carne gatuna.
Qué bonicos... los cabronessssss!!!!
Pues eso, que fue aparecer los gaticos
y... venga a estornudar, lloriqueos, mocos p'allí, mocos p'allá,
mente semi-embotada... mal cuerpo, vamos!
Uno que tiene alergia a los gatos y el
no tomar la medicación cuando toca...pues ya se sabe.
La cosa es que el tema se ha alargado
unas semanas y aún estoy con una nariz que no es mía, mal cuerpo,
ventolín por un tubo...hecho una piltrafa!
En otros asuntos... esta semana no ha
habido partida por temas personales varios (reuniones de padres, líos
de trabajo, etc.), pero este lunes volveremos con nuevas energías en
nuestra peculiar aventura de Final Fantasy.
También deciros que he
comprado/colaborado/adherido a la campaña para echar una mano a la
gente de La marca del Este, y ya tengo en mi poder el PDF del Manual
Básico del sistema de juego y el Vademécum del mismo.
Tras la
desgracia en Lorca, la gente de La Marca quedó bastante tocada y
aparecieron muchas propuestas para ayudar. Una de ellas fue la venta,
en Holocubieta, a muy buen precio de estos dos documentos. Uno de
ellos (el manual de reglas) ya lo tenía, pero todo sea por
colaborar!
Y poca cosa más... estad atentos que
la cosa sigue viva!
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