Por un lado, descubrieron un sala con un par de fastuosas y brillantes estatuas que mostraban un enorme espadón de afilada hoja y un bastón con una piedra rojiza en una de las puntas.

Por otro lado Green, que había escapado a tiempo de la engañosa sala, continuaba su individual exploración de la planta, encontrando las escaleras de bajada.
Y qué hacia mientras Galahad y Jonás? Descubrir a un grupo de hombres-tigre que se disponían a violar a una mujer-ciervo del todo asustada.
La efectividad de la pareja de aventureros fue suficiente para liberar a la hembra del salvajismo de sus captores. Tras tranquilizar a la salvaje criatura, pudieron comunicarse y entender que en el templo existía un humano que parecía dirigir aquella pesadilla de hombres-bestia dominados.
Con Eldelbuk y Sansón libres de la sala, y de los efectos del gas hipnótico, y Green, Galahad y Jonás unidos de nuevo, el grupo decidió bajar a la siguiente planta para intentar descubrir a aquel misterioso humano y sus oscuras intenciones.
Perdón por el ENORME retraso que llevan estas crónicas, pero ya sabéis que he estado liado estas últimas semanas. En estos días pongo al día nuestras aventuras y preparo al personal para el capítulo final.
Saludos
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