BATTLETECH...AQUEL JUEGO SIN JUGAR

Tendría yo unos 12 o 13 años (y de eso hace ya unos días), que descubrí la existencia de un juego que me llamó muchísimo la atención. Se trataba de un juego de estrategia bélica donde pilotabas un enorme robot de guerra, o mech, y debías acabar con tu oponente teniendo en cuenta una serie de aspectos: tu tipo de mech, el terreno, tu armamento, el calentamiento del equipo, etc.

Ese juego era Battletech.

No recuerdo a ciencia cierto como fue ese primer contacto, donde lo descubrí (supongo que en alguna revista)...ni como hice para que llegara a mis manos. De lo que sí que estoy seguro es que fue mi primera compra por correo. Aún recuerdo como fui hasta correos para ir a buscar el paquete que tanto ansiaba y esperaba.

Y tengo muy clara la sensación de alucine cuando descubrí el manual, los dibujos de los gigantescos robots, el trasfondo...

Soy un alucinado de la ciencia ficción y todo lo que sean robots, naves espaciales y alienígenas, me pone tontorrón. Y este juego me dio para imaginarme al mando de una máquina de 12 metros de alto, 20 toneladas de peso y un montón de armamento bajo mis órdenes.

Pero este juego tenía un pequeño problema: jugar solo es muy aburrido. Y la verdad, de mis amigos de infancia, a muy pocos les gustaba el rollo robotijos, rol o juegos de mesa. Una opción era la de jugar con mi primo, a quién sí le gustaban estas frikadas y alguna vez nos habíamos encontrado para jugar alguna partida de Star Wars. Pero la poca coincidencia para vernos y demás, no acabó de cuajar nuestros encuentros de juego.

También tengo que decir que no es un juego al que le pilles el “tranquillo” a la primera. No es un Cluedo, ni un Imperio Cobra, ni nada por el estilo, Su cierta complicación tiene: que si los movimientos, que si la diferencia de terreno, que si el sobrecalentamiento de radiadores, que si posibilidades de disparo... 

Chupao al lado de Battletech! 

Así fue como mi querido Battletech, quedó en su caja y fue abierta en algunas ocasiones por motivos de añoranza. Porqué en alguna ocasión, he vuelto a abrir la caja para hojear de nuevo el manual, volver a ver los dibujos, desplegar el mapa hexagonal...y volver a imaginar las batallas de mechs que tan palote me ponen. Diooooossssss!!!!

Alguna vez ha aparecido la posibilidad de plantear una partida, pero por un motivo u otro, se ha desvanecido la propuesta y me he vuelto a quedar con las ganas. Es una maldición?

23 años han pasado desde que recibí mi Battletech...y ni una sola partida he jugado!

Pero estoy decidido a cambiar el destino de mi relación con este juego. He vuelto a coincidir con mi primo, el friki con el jugábamos a rol de pekes y que ahora será una de mis cobayas para una partida de Star Wars, y la propuesta será o-bli-ga-da. “Mañana un Battletech y no hay excusas...he esperado 23 años, creo que es suficiente!”. Y seguro que me dice que sí...

Y si no...seguro que alguno que conozco de La Partida del Lunes (Alcalde, Juan...) o del Pati (Gaelos, Gothalo, Red Goblin...) se animan a probarlo.

Miiiii tesssssooooorooooo!!!

 

De momento, he vuelto a recuperar la caja de casa de mi madre. La he vuelto a abrir y...diooooosssss! Como mola el Archer, o el Marauder, o el Phoenix Hawk, o el Battle Master...