En alguna ocasión he comentado que la
triada de ser friki-padre-educador provoca, más de una vez, la
voluntad de llevar los juegos de rol a los más peques.
He compartido las partidas que en estos
dos últimos veranos he montado con lo chavales del camping, las
aventuras que he dirigido con aquellos más jóvenes que aparecían
en la jornadas de rol de la asociación El Pati, las sesiones de
juego con mis hijos (Petit Goblin y Piltrafilla)... Incluso escribí
una entrada de los importantes valores pedagógicos que,
personalmente, veo en los juegos de rol.
La gente, desconocedora aún en estos
días de los que son los juegos de rol, continua relacionando este
tipo de juego interpretativo a gente rara, vestida de negro y con
ganas de coger un hacha y comenzar a cortar cabezas, dibujando a
continuación símbolos satánicos con la sangre de sus víctimas.
Cágate lorito, neng!
No digo que seamos un poco raros...que
a veces lo somos...pero que a los juegos de rol, les queda mucha
camino por hacer, muchas cosas para dar a conocer y muchas
aplicaciones positivas en diversos campos: educación, empresa, etc.,
eso está claro.
Pero algunos, a los que realmente
admiro y envidio (sanamente, se entiende!), se han avanzado a ese
esperado momento rolero y ya utilizan los juegos de rol como
herramienta para trabajar con niños/adolescentes ciertas aspectos de
la educación.
Laboratorio Friki es uno de ellos.
Mediante sus entradas, he podido seguir como introducen este tipo de
juego y aplicarlo en el mundo de la educación. Y la verdad, ganas me
dan de lanzarme a crear un proyecto para aplicarlo en alguna ocasión.
Y solo puedo decir que, si os queda
alguna duda al respecto de lo que os digo...pasad por LaboratorioFriki y saldréis de dudas rápidamente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario