jueves, 26 de julio de 2012

OTRA PARTIDA FINALIZADA


Como ya va siendo normal en mi, una vez acabada una de mis partidas como master, me gusta realizar una pequeña valoración para analizar lo que ha fallado, e intentar mejorar en próximas partidas, y felicitarnos por aquellos momentos que quedaran en nuestra memoria y harán de “Peligrosa Inocencia” una aventura digna de recordar.
Evidentemente, esta valoración la realizo como master. Es decir: es solo una de las visiones de la partida, ya que los jugadores (Jorge, Alcalde, Juan, Alícia y Enric) también tiene mucho que decir al respecto.
Así pues...vamos al tajo!

La valoración general de la campaña ha sido positiva. Es cierto que había puesto muchas ganas en la preparación, la historia, los encuentros..., imaginado la aventura como una ”gran aventura”. La cuestión es que, una vez finalizada, creo que puse demasiadas expectativas en ella. El listón, dentro de mi cabecita de “master-cabrón”, estaba demasiado alto y la sensación al acabar es un poco agri-dulce.
El desarrollo de la partida, la dividiría en tres bloques:

El inicio.
Presentación de los personajes, la situación, la trama, el caso de Duna... Comenzamos con buen pie, los jugadores se meten con ganas en la historia y los enganches funcionan (con algún que otro cambio de última hora...pero funcionan!).
Llevar la historia preparada hace que todo esté bajo control y te sientas cómodo dirigiendo la partida.

Las dudas.
Comienzan a crearse situaciones entre personajes (no entre jugadores), que frenan el ritmo de la partida. Aparecen las dudas sobre realizar la misión, como afrontar las situaciones de grupo, relaciones internas algo tensas, etc.
De hecho, escribí una entrada en el blog donde se resumían todas estas situaciones. Leerla y sabréis a qué me refiero. Pincha aquí y accederás a ella.

El mata-mata.
Algo desanimado, hice ciertas modificaciones para ajustar la partida a lo que había observado en las sesiones. Esto es: un templo típico de dungeon con mata-mata a tope!


Aunque no era lo que tenía pensado, la cosa funcionó y se acabó con buen sabor de boca.
Esta parte final se centraba en un templo repleto de trampas, enemigos, enigmas, tesoros... Y una frase de uno de los jugadores, puede resumir el sistema del grupo para afrontar esta situación. La frase era algo como: “esto es como jugar a un video-juego...como al Resident Evil: tenemos que entrar a todas las salas y no dejar ni una!”.

A parte de esta esquema que resume las diferentes escenas de la campaña, también hemos podido “modificar” alguna cosa de cara a próximas partidas. Por ejemplo... Fui demasiado benevolente a la hora de otorgar pociones sanadoras, tanto de compra, como en el templo, y eso afectó en las situaciones de combate. Algo más de “ojo, que me muero!” hubiera puesto más tensión al asunto.

Ni un muerto, nene, ni un muerto...

Algunos hechizos, especialmente el “muro de pinchos” deben modificarse ya que fue un recurso muy utilizado por Kibana, la kender, y tiene poco gasto en karma para lo útil que es para el grupo.

Pero bueno, como dije al principio de la entrada: una buena partida, disfrutada y, como siempre, mejorable!
Ahora, veamos qué dicen los jugadores...

5 comentarios:

  1. Como jugador... partida de la que guardo un recuerdo grato y enorme ya que me lo pasé muy bien. El momento de conflictos entre personajes, el "yo abandono" que salté en alguna ocasión, las peleas... con todo eso disfruté como un cerdo... reconozco que en algún momento buscaba el conflicto para crecer como personaje y hacer más compleja la partida. ¿Que no hubo gancho? Quizá como personaje no, pero como jugador hubo mucho.

    El mata mata final, divertido, pero después del gran viaje anterior me supo a poco.

    Pero vamos creciendo como jugadores y equipo. ¡Si esta planificamos movimientos y estrategias! Malas alguna, vale, pero lo hicimos que ya es un paso.

    ResponderEliminar
  2. Bueno yo ya he comentado que me ha encantado la partida.Es cierto que hubo algunas sesiones donde la tension entre pjes hizo que no disfrutase en demasia de la partida.Pero creo que finalizamos la partida como un grupo unido.A mi me gusto el templo final,ypo no lo llamaria un matamata ya que habia de todo,enigmas,tesoros,adivinanzas y lucha,quien da mas.
    Estoy de acuerdo contigo que el tema magia se ha de seguir evolucionando y ajustar el karma al efecto del conjuro o crear nuevos conjuros que contraresten otros.Y en cuanto a las pociones,aunque vaya en conttra mia,tienen que ser un bien escaso .Nosotros las tomamos con una facilidad ni que fueran aspirinas.esto realmente le quita mucha emocion al asunto.Por ejemplo en la lucha final no tuve en ninguun momentto sensacion de peligro y eso creo que es malo.
    En resumen partida genial

    ResponderEliminar
  3. Bueno mi opinion respecto a la aventura, muy buena, creo que cada vez se hacen mejores partidas. Te felicito.
    Respecto los pj, creo que todos estubieron en su papel aveces peor,
    aveces mejor, sobre todo el Kender, Alicia lo borda, tambien el semi-orco de Enric,la semi-elfa de Jorge o el clerigo de Alcalde. No asi mi asesino Siete con el que no me econtre agusto y en ciertos momentos de la partida no supe que movimientos o actuaciones eran los correctos. Uno no para de aprender.
    Mi felicitacion, master.

    ResponderEliminar
  4. Me alegro que os gustara la aventura, esa era toda la intención...
    Por lo que habíamos comentado en la cena de final de temporada (en breve una entrada sobre ella), la sensación de no acabar de equilibrar nuestras interpretaciones como Pj's es generalizada. Poco a poco pillaremos el "feeling" a este tema, seguro.
    Y sí, la finalización de la campaña fue un poquillo...como decirlo...light?
    Alcalde tiene razón: demasiadas pociones, demasiadas facilidades para no acabar al límite de la muerte, pocas muertes (ehem!)...
    Puede que el hecho de ser demasiado generoso en los "regalitos" que encontraron los Pj's, influenciara demasiado en que los jugadores perdieran esa tensión de poder ver morir a su personaje.
    Como siempre iremos mejorando como master y siendo un poco más...cabrón...de "master-cabrón", digo!

    Saludos

    ResponderEliminar
  5. Falta mi felicitación al máster. Puede que la dedicación y esfuerzo dedicados a crear la partida no dieran los frutos esperados. Los jugadores a veces somos más cabrones que el máster, y a veces el lunes nos pilla poco (o demasiado) inspirados. Pero en conjunto ha sido una gran partida. Y hemos aprendido mucho, por ejemplo lo que comentáis todos, la emoción aumenta con menos poción, y que el muro de pinchos resulta útil en zona de pasillos.
    Desde mi incapacidad de dirigir una partida y muy humildemente felicito al creador y a sus criaturas. ¡Que grandes momentos!
    Y me queda aprovechar para protestar por la jodida moda de: "Que alguien coja al Kender antes de que toque nada". La de trampas que habrían compensado cualquier posible exceso de pociones...

    ResponderEliminar